jueves, 22 de octubre de 2009

Templo - Experiencia sublime

"Nuevamente recalcamos las bendiciones personales que se reciben por medio de la adoración en el templo, y la santidad y la seguridad que reinan dentro de esas sagradas paredes. Es la Casa del Señor, un lugar de revelación y de paz. Al asistir al templo, aprenderemos más plena y profundamente el propósito de la vida y el significado del sacrificio expiatorio del Señor Jesucristo. Hagamos del templo, conjuntamente con la adoración, los convenios y el casamiento que se efectúan en sus recintos, nuestra meta terrenal suprema y nuestra experiencia más sublime. Compartamos con nuestros hijos los sentimientos espirituales que tengamos en el templo. Y enseñémosles con más devoción y más naturalidad las cosas que debidamente podamos decirles en cuanto a los propósitos de la Casa del Señor."
(Pte. Howard W. Hunter, Liahona enero 1995, pág. 100)

No hay comentarios:

Publicar un comentario